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Marzo-Septiembre  2009

Usura, créditos predatorios y educación financiera

CategoríaMarzo-Septiembre 2009Educación

Kristiano Raccanello

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__________________________________________________________________ Kristiano Raccanello Usura , Créditos Predatorios y Educación Financiera 1 . Antecedentes . La actividad del préstamo tiene raíces antiguas . Desde hace más de dos mil años existe el concepto de garantía y de la sumisión del deudor al acreedor ( Burkett , 1995 ). Asimismo , tanto la Biblia como el Corán hacen referencia a las posiciones de cada doctrina en torno a los préstamos y a los intereses , permitiendo los primeros y reservándose sobre los segundos . Al respecto , en el Antiguo Testamento se indica que No tomarás de tu hermano logro de dinero ( )” ( Deuteronomio 23 : 19 ), mientras que el Corán afirma que Aquellos que devoran usura no pueden levantarse ( )” ( 2 : 275 ). Los mercados del crédito y la usura se han desarrollado conjuntamente , aunque esta última no tuvo siempre la connotación negativa que actualmente se le atribuye ( La Rana , 1999 ). Durante la época romana el usurae se refería al dinero u otro producto , generalmente agrícola , que el deudor tenía que proporcionar al acreedor como compenso por el préstamo obtenido , mientras que el usus era el compenso por el uso del capital proporcionado por terceros y que corresponde a la noción del interés actual . En particular , desde un punto de vista histórico , paralelamente al contrato que preveía la restitu ción de lo prestado , se implementaba también otro ( stipulatio usurarum ) que preveía el pago de los intereses . Las tasas que podían cobrarse dependían de la posición y de la actividad del prestatario ( Muratori , 1751 ) y alrededor del año 450 A . C ., posiblemente por los abusos que se realizaban , los intereses fueron establecidos por las duodecim tabularum leges en un 8 . 33 por ciento anual . Sucesivamente , la iglesia condenó las prácticas del préstamo usurero y esta posición se endureció a lo largo de los siglos con los Concilios de Elvira ( 306 ), Nicea ( 325 ) 1 , Clichy ( 626 ) 2 y Viena ( 1311 ) 3 . Debido a la práctica común , el cobro de intereses con el tiempo fue paulatinamente tolerado y sucesivamente aceptado . La iglesia en el siglo XV admitió el cobro de los intereses compensatorios pero siguió rechazando los intereses lucrativos . Prueba de ello consiste en la Vix Pervenit enviada por parte del papa Benedicto XIV ( 1745 ), en la cual hace manifiesto que la usura es una forma de agresión hacia los pobres . En Italia hacia finales del siglo XV la iglesia católica apoyó la institución de los montes de 1 Estos Concilios prohibieron a los clérigos llevar a cabo la usura . Kristiano Raccanello es profesor e investigador del Departamento de Economía , Universidad de las Américas Puebla , Exhacienda Sta . Catarina Mártir , 72820 , Cholula , Puebla , México . 2 Este Concilio prohibió también a los laicos la práctica de la usura . 3 La usura fue declarada como práctica herética . __________________________________________________________________ Laissez-Faire 31
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__________________________________________________________________ piedad con el fin de proporcionar una alternativa a los préstamos de la comunidad judía ( Bresnahan Menning , 1993 ), que desde los siglos X y XI estaba siendo acusada de prácticas usureras ( Muratori , 1751 ). En realidad , a pesar de la influencia eclesiástica , la actividad de los prestamistas era tolerada por razones económicas por parte de las autoridades políticas ( Calimani , 1987 ). La percepción negativa de los agiotistas podría haberse mantenido a lo largo del tiempo debido a que la transmisión de los valores morales ( Raccanello , 2004 ) han sido influenciada por la religión ( Le Goff , 1987 ). A pesar de los aspectos históricos , hoy en día estos intermediarios financieros constituyen una opción de financiamiento disponible en prácticamente todos los países . Las actividades de los agiotistas comparten rasgos comunes bien identificados : los préstamos son de corto plazo y sujetos la presentación de alguna garantía , mientras que las tasas de interés son mucho más altas respectos a las del mercado financiero formal . Su presencia ha sido documentada en los Estados Unidos ( Koerner , 2001 ), Japón ( Kon , 2003 ), Italia ( Lenza , 2003 ) y en el Reino Unido ( Rawlingson , 1994 ), entre otros países . La disponibilidad de datos y otra información sobre estas actividades está en función del marco institucional del país analizado ( Aryeetey , 1995 ). Donde la práctica es ilegal , la información en torno a los prestamistas y a los clientes es escasa . Estos últimos , conscientes de estar recurriendo a una fuente de recursos que la sociedad reprocha , tienden a no reportar su uso por el estigma social que implica su uso . Esto provoca que sea muy difícil medir la extensión del mercado y sus características ( La Rana , 1999 ; De Leo et al ., 2003 ). Frecuentemente , la existencia de las prácticas usureras emerge por las consecuencias que enfrentan los deudores en caso de incumplimiento . Cuando la criminalidad organizada no está involucrada en la transacción , el prestamista puede ejercer presiones y tomar posesión de la garantía . Daly y Walsh ( 1988 ) en un estudio para el Reino Unido reportan que sólo el 33 % de los entrevistados indicó haber sufrido algún acto de agresión y / o intimidación , más no de violencia . Por otro lado , la situación es radicalmente distinta si la criminalidad organizada se asocia con la actividad del préstamo , ya que las amenazas físicas y la violencia son los mecanismos que usualmente se implementan para presionar al deudor ( Long , 1990 ; DeMercurio , 1999 ). Como ocurre en la gran mayoría de los casos , si el prestamista opera en la informalidad es evidente que éste no pueda recurrir a alguna instancia formal para hacer cumplir el contrato . Sobretodo en los países en vía de desarrollo , en caso de incumplimiento , además de que la garantía se vuelve propiedad del prestamista , el deudor se enfrenta con la negativa de obtener nuevos créditos ( Aryeetey , 1995 ) debido al deterioro de la imagen del deudor frente a la sociedad . En otros casos , la sanción social puede extenderse hasta a la siguiente generación ( La Ferrara , 1999 ). En línea con lo anterior , se ha detectado la existencia de un buró de crédito a nivel informal a través del cual los prestamistas comunican a sus pares los datos de los deudores que no cumplen con sus obligaciones ( Raccanello , 2008 ). A lo largo del tiempo , los intermediarios y sus prácticas han evolucionado , y recientemente han surgido nuevas modalidades de préstamo y estrategias dirigidas hacia aquellos individuos que necesitan de liquidez inmediata . __________________________________________________________________ Laissez-Faire 32
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__________________________________________________________________ 2 . Créditos predatorios . Principalmente ( más no exclusivamente ) en los Estados Unidos , durante las últimas dos décadas , la expansión del crédito predatorio ha sido acompañada por un proceso de empobrecimiento de los habitantes ( Peterson , 2004 ) combinado con un mayor nivel de endeudamiento ( Stegman y Faris , 2003 ). El término de crédito predatorio ”, acuñado alrededor de 1994 , comenzó a aparecer con mayor frecuencia a comienzo de esta década ( Morgan , 2007 ) y se refiere a las prácticas implementadas por parte de prestamistas o intermediarios financieros quienes , a través de la manipulación o proporcionando información incompleta , toman ventaja sobre el prestatario valiéndose de su falta de conocimientos en relación a los términos del préstamo . La asimetría de las condiciones contractuales que favorecen a los prestamistas , provoca que la contraparte tenga frecuentemente serios problemas para liquidar la deuda ( U . S . Department of Housing and Urban Development , 2001 ), impactando negativamente en su bienestar ( Morgan , 2007 ). Las características de estas prácticas han sido identificadas desde hace tiempo , pero su precisa definición es compleja por los cambios que presentan para evadir las leyes en materia ( Trufant Foster , 1940 ; Litan , 2001 ; U . S . Department of Housing and Urban Development , 2001 ; Peterson , 2004 ). Habitualmente , las prácticas asociadas con el crédito predatorio consisten en el refinanciamiento de hipotecas , préstamos sobre cheques posfechados , agio , crédito prendario y ventas a crédito ( U . S . Department of Housing and Urban Development , 2001 , Silverman , 2005 ). Sólo en los Estado Unidos la industria del préstamo sobre cheques posfechados se ha desarrollado de forma sorprendente ; desde los 10 billones de dólares en el 2000 sus ingresos se estimaron alcanzar los 28 billones en el 2006 , de los cuales el 90 % provendría de clientes frecuentes ; es decir , de aquellos que no han logrado pagar el préstamo en el plazo establecido ( Ernst , Farris y King , 2003 ; King , Parrish y Tanik , 2006 ). El crecimiento de esta industria se ha visto beneficiado por la heterogeneidad de la legislación relacionada con control de las tasas de interés en cada estado ( Consumer Federation of America , 2008 ). El incremento de la deuda y los bajos niveles de ahorros de los hogares , han puesto en evidencia el manejo deficiente de los recursos económicos-financieros por parte de las familias ( Hogarth , Hilgert y Schuchardt , 2002 ), las cuales , al preferir un mayor consumo en el corto plazo parecen no anticipar las consecuencias de su financiamiento en el mediano y largo plazo . De hecho , los consumidores tienden a utilizar servicios financieros complementarios sin poner mucha atención a las tasas de interés ni a otros cargos relacionados con su uso . Principalmente , más no exclusivamente , los individuos vulnerables o los que pertenecen a las minorías étnicas son los que carecen de una adecuada preparación en materia financiera ( Carr y Kolluri , 2001 ; Carr y Schuetz , 2001 ). A partir de la década de los 90 , la atención hacia la educación financiera ha sido justificada por una mayor sofisticación de los productos disponibles en los mercados financieros que demandan el manejo de habilidades específicas para su evaluación . Asimismo , otros factores que han operado en el mismo sentido consisten en los cambios en el sistema de pensiones , en los aspectos tecnológicos , y en el incremento de las prácticas de créditos __________________________________________________________________ Laissez-Faire 33
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__________________________________________________________________ predatorios ( Hilgert , Hogarth y Beverly , 2003 ; Lusardi , 2008 ). De esta forma , los individuos que poseen mayores conocimientos en materia financiera podrán seleccionar las opciones más convenientes para la acumulación y preservación de sus ahorros y de otros activos indispensables para garantizar una mejor calidad de vida en la vejez ( OECD , 2005 ). Desde un punto de vista más amplio , mayores conocimientos proporcionarán beneficios para la economía en su conjunto al fomentar la competencia y la eficiencia de los mercados ( Hilgert , Hogarth y Beverly , 2003 ; OECD , 2005 ). Consecuentemente , los objetivos más importantes de los programas de educación financiera tienden a concentrarse en la promoción de dichos conocimientos entre los sectores más vulnerables ( Vitt et al ., 2000 ), dar a conocer las consecuencias del sobreendeudamiento y de sus efectos en el largo plazo ( Cohen y Sebstad , 2003 ), y en proporcionar información en relación a las prácticas predatorias ( Todd , 2002 ; Lucey y Giannangelo , 2006 ). 3 . Educación financiera . La OECD ( 2005 : 13 ) define la educación financiera como “( ) el proceso mediante el cual los consumidores de productos financieros e inversionistas mejoran su comprensión de los conceptos y productos ( ) desarrollando las habilidades ( ) para ser más conscientes de los riesgos financieros , de las oportunidades , tomar decisiones informadas y ( ) otras medidas eficaces para mejorar su bienestar financiero .” A nivel internacional , la literatura reporta que la mayoría de los individuos carece de una apropiada educación financiera ( Matul , Pawlak y Fałkowski , 2004 ; Miles , 2004 ; OECD , 2005 ; Orton , 2007 ; Mandell , 2009 ). Las personas que presentan menores conocimientos son las que pertenecen a alguna minoría ( hispanos y afroamericanos en particular ) ( National Council on Economic Education , 1999 ; Kotlikoff y Bernheim , 2001 ; Lusardi y Mitchell , 2007 ; y Sun , Barboza y Richman , 2007 ), las mujeres , los individuos con escasa y mediana educación ( Lusardi y Mitchell , 2006 ), los jóvenes , los adultos mayores , y aquellos que pertenecen a familias con niveles de ingresos relativamente bajos ( OECD , 2005 ; Lusardi , 2008 ; Agarwal , Driscoll , Gabaix y Laibson , 2009 ). Aún cuando existe una natural asociación entre mayores conocimientos financieros y mejores decisiones en la materia , posiblemente por influir sobre el comportamiento de los hogares a través de la variación del conjunto de opciones a su disposición ( Maki , 2004 ; van Rooij , Lusardi y Alessie , 2007 ), los estudios que proporcionan evidencia de causalidad son escasos ( Hilgert , Hogarth y Beverly , 2003 ; Lusardi y Mitchell , 2007 , Lusardi , 2008 ). No obstante , la literatura tiende a suponer que mayores conocimientos conllevan a mejores resultados y que consisten , de forma específica , en un incrementos en los ahorros ( Bernheim y Garrett , 1996 ; Bernheim , Garrett y Maki , 2001 ; Clancy , Grinstein-Weiss y Schreiner , 2001 ; Moore et al ., 2001 ), una mayor acumulación de riqueza ( Bernheim , Garrett y Maki , 2001 ; Lusardi , 2003 , 2004 ), una mayor cantidad de ahorro para el retiro ( Clark , d Ambrosio , McDermed y Sawant , 2003 ; Lusardi , 2004 ; Bayer , Bernheim y Scholz , 2008 ), una menor tasa de default en el repago de créditos hipotecarios ( Hirad y Zorn , 2001 ) y con una reducción de la deuda ( Elliehausen , Lundquist , y Staten , 2007 ). __________________________________________________________________ Laissez-Faire 34
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