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Marzo  2017

Sartre y el Mosquito Deslumbrado

CategoríaMarzo 2017Economía

Julio César De León Barbero

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__________________________________________________________________ Julio César De León Barbero adu Sartre y el Mosquito Deslumbrado El último libro de Sartre , Las palabras , 1 quiere ser una autobiografía con doble propósito . Por un lado , describir el proceso personal por el cual decide llegar a ser lo que fue : un escritor . Por otro , exponer su concepción antropológica que ya había elaborado y descrito minuciosamente en El ser y la nada . Una vez aceptado el principio de que cada quien es el menos indicado para evaluar su propia vida , se comprende la visión que Sartre elabora sobre su niñez : impone su perspectiva existencialista de forma tan contundente que pareciera que en su infancia ya era fácil predecir el rumbo de su vida paso a paso , milímetro a milímetro . Algo por demás contrario a la concepción de la vida humana que elaboraría en sus años de madurez . Por ello , cuando se lee esa autobiografía , uno se pregunta cómo un chico de siete o nueve años ( precoz , por supuesto , como lo fue Jean-Paul ) podía manejar categorías y tener intuiciones que caracterizan el pensamiento del Jean-Paul adulto . La explicación realmente consiste en que se trata de una autobiografía en gran medida novelada y en la cual , más que mostrar el desarrollo interior del individuo , se emplean los filtros de la mente 1 Jean-Paul Sartre , Las palabras , trad . Manuel Lamana ( Buenos Aires : Losada , 1964 ). adulta para recrear lo que al autor le hubiera gustado que sucediera en su mundo interno . Los hechos puede que sean innegables , como la relación con su abuelo , con el segundo esposo de su madre , y su interés por los libros , cuya compañía le resultó bienhechora en tanto y en cuanto niño solitario . Precisamente al evaluar aquella especie de romance con los libros , Sartre señala : Cuando cogía un libro , por mucho que lo abriese y lo cerrase veinte veces , veía que no se alteraba . Al deslizarse sobre esa substancia incorruptible que es el texto , mi mirada no era más que un minúsculo accidente superficial , no desordenaba nada , no desgastaba en absoluto . Yo , por el contrario , pasivo , efímero , era un mosquito deslumbrado , atravesado por las luces de un faro . 2 « Yo , por el contrario era un mosquito deslumbrado ». Esa es una declara- 2 Ibid ., p . 123 . Julio César de León Barbero es licenciado en Filosofía por la Universidad de San Carlos , licenciado en Teología por la Universidad Mariano Gálvez y doctor en Filosofía por la Universidad Rafael Landívar . Profesor universitario de Filosofía en la Universidad Francisco Marroquín , es autor del libro El animal que sigue normas . Laissez-Faire , No . 46 ( Marzo 2017 ): 47-53
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__________________________________________________________________ ción antropológica a despecho del lenguaje literario metafórico . Por lo menos hay que aceptar que el mosquito es poseedor de un ser ya dado , sin opciones , sin posibilidades de ser otra cosa . Es parte del ser-ahí , de lo-en-sí , opaco , sin causa , sin necesidad , sin razón , gratuito y sin sentido alguno , como lo afirma Sartre una y otra vez en El ser y la nada : El ser-en-sí no es jamás ni posible ni imposible : simplemente es . Esto es lo que en términos antropomórficos expresará la conciencia al decir que el ser-en-sí está de más ; o sea que ella no puede absolutamente derivarlo de nada ; ni de otro ser , ni de un posible , ni de una ley necesaria . Increado , sin razón de ser , sin relación ninguna con otro ser , el ser-en-sí está de más por toda eternidad . 3 Pero resulta que el mosquito sartreano no es un mosquito cualquiera . Es un mosquito , agrega , con la capacidad de deslumbrarse . Asombroso . Inaudito habría que decir . Sencillamente porque el deslumbrarse solo es capacidad de la conciencia , por lo menos de la conciencia pre-reflexiva . ( No está claro si puede darse cuenta de que se está deslumbrando , capacidad propia de la conciencia reflexiva .) Como mínimo es un mosquito que se percata de lo que tiene enfrente ( libros ), lo cual es lo esencial en Sartre al abordar la cuestión de la conciencia . La mera percatación constituye para él la actividad fundamental de la conciencia . Esta postura manifestada en sus primeros trabajos sobre el ego , la imaginación y las emociones , 4 lo llevó lejos de las ideas de Des- 3 Jean-Paul , El ser y la nada , 3 ª ed ., trad . Juan Valmar ( Buenos Aires : Losada , 1972 ), p . 36 . trad . Mónica Acheroff ( Madrid : Alianza Edi- Calden , 1968 ). __________________________________________________________________ 48 cartes puesto que Descartes comienza por una conciencia reflexiva cuya actividad constituye al yo como un objeto ( cogito , ergo sum ). El mosquito sartreano es , entonces , ser-en-si y conciencia . Se conjuga en él lo-en-sí y el-para-sí . Esta amalgama no es sino una negación de lo que Sartre hilvanó en su obra cumbre : El ser y la nada . 1 . El esencial interés de Sartre . En gran medida el distanciamiento de Sartre respecto a Heidegger consiste en la preocupación fundamental que anima sus ideas . La cuestión central en Heidegger es la cuestión de ¿ por qué hay algo y no más bien nada ? La sempiterna pregunta e inquietud por el Ser que dio pie a innumerables discursos metafísicos . A Sartre le inquieta otra cuestión : ¿ por qué hay conciencia ? Inquietud de carácter antropológico que obliga a penetrar los ámbitos de la psicología , la sensibilidad , el yo , la imaginación , las relaciones interpersonales y la cuestión de la corporeidad . Amén de una definición de hombre que es precisamente lo que Sartre se resiste a aceptar . El rechazo sartreano a definir al hombre surge de su piedra de toque fundamental : La existencia precede a la esencia . Completamente a contrapelo de la ontología y la metafísica tradicionales que insistieron en que la esencia es antes que la existencia . Por lo menos deístas y teístas así lo consideraron , convencidos de que el mundo estuvo antes en la mente del Creador . Pero aún quienes , alejados del ser divino , elaboraron una teoría del Ser sostuvieron que la esencia precede a 4 Jean-Paul Sartre , Lo imaginario , trad . Manuel Lamana ( Buenos Aires : Losada , 1976 ); Bosquejo de una teoría de las emociones , torial , 2005 ); La trascendencia del ego , trad . Oscar Masotta ( Buenos Aires : Ediciones
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__________________________________________________________________ la existencia el más vivo ejemplo de ello es Platón . Antropológicamente Sartre parte de poner la existencia real del hombre en el mundo carente totalmente de atributos , características o propiedades . Es decir , renuncia al concepto de naturaleza cuando del hombre se trata . No hay tal naturaleza humana . Preguntamos , no obstante , ¿ logra Sartre evadir la cuestión de definir al hombre ? ¿ Su esfuerzo por alejarse de las caracterizaciones que integran toda definición es exitoso ? ¿ O el mosquito sartreano resulta , en último análisis , imponiéndose y arruinando todo su esfuerzo ? Por naturaleza se ha entendido , en la filosofía occidental , como aquello que caracteriza a un ser o las cualidades que hacen de los objetos lo que son . Agregando que precisamente por ello la naturaleza es invariable , una e idéntica en todos los que de ella participan . La modernidad continuó aseverando lo que ya Aristóteles había proclamado . Al decir de Ortega : El siglo XVIII es fiel a su maestro , el XVII , en la convicción de que el hombre posee últimamente una naturaleza ”, un modo de ser definitivo , permanente , inmutable . 5 Sartre no quiere compromisos con esta manera naturalista de entender al hombre . Sostiene que primero está la existencia , el estar en el mundo , ante todas las cosas , entre todas las cosas . Carente de identidad , vacío de cualidades y determinaciones . Sencillamente como nada . 5 José Ortega y Gasset , Pasado y porvenir para el hombre actual ( Madrid : Revista de Occidente , 1962 ), p . 63 . 2 . El en-sí y el para-sí . Los conceptos de en-sí y para-sí son los conceptos clave para entender El ser y la nada . La mayor parte de la obra está dedicada al segundo concepto , al para-sí . No solamente por el interés sartreano al escribirla sino porque del en-sí no hay mucho qué decir excepto que es opaco , indiferenciado , macizo , sin razón alguna , sin causa y sin necesidad . Desde la perspectiva existencialista sartreana el foco de interés está fijado en el hombre , en el para-sí , cuyo carácter consciente es lo primordial de este trabajo . Dejaremos , por lo tanto , fuera de consideración el resto de aspectos que pertenecen al para-sí y que han sido abordados vez tras vez . Este trabajo quiere hacerse cargo de interrogantes como : ¿ Qué es la conciencia ? ¿ Qué actividad desempeña ? ¿ Qué relación guarda con la idea de un yo ? ¿ En qué sentido es absolutamente libre la conciencia ? ¿ Cómo se relaciona con el ser-en-sí ? ¿ Se relaciona consigo misma ? Punto de partida obligado es reconocer que si la conciencia es conciencia de algo , entonces la conciencia es , debe ser , tiene que ser diferente del ser-en-sí , totalmente distinta del ser . Ha de ser , obligadamente , NO SER . Por ello la conciencia lleva a cabo una tarea permanente de negación , de anulación y de neantización . Neantizar es un proceso constante . Ante cualquier objeto ( esta revista por ejemplo ) la conciencia niega que ella sea la revista . Se distancia de ella y la hace destacarse de todo el trasfondo constituido por el resto de objetos del entorno . La conciencia también niega que la revista sea otra cosa y anula , niega , nihiliza todo lo demás . Por ello Sartre afirma sin rodeos que la nada es traída al mundo por el __________________________________________________________________ 49
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__________________________________________________________________ hombre : debe existir un ser que no podría ser el Ser-en-sí –, el cual tenga por propiedad nihilizar la Nada , soportarla con su propio ser , desplegarla perpetuamente desde su propia existencia : un ser por el cual la Nada advenga a las cosas . 6 ¿ Pero cómo surge la conciencia ? Una lectura descuidada de Sartre podría conducir a pensar que surge por una especie de desgarramiento en el ser-en-sí gracias al cual se origina la conciencia . Esto es imposible en Sartre ya que implica que el ser-en-sí adquiere forma de conciencia sin abandonar su ser de en-sí . También porque la conciencia demanda una permanente separación y distanciación del ser . Así , el ser-en-sí y la conciencia no pueden estar unidos en uno ; no pueden ser uno solo . El mosquito deslumbrado es algo imposible . A estas alturas lo que Sartre ha dicho es que la conciencia no es el ser-en-sí ; que se distancia del en-sí permanentemente ; que su tarea principal parece ser la negación o nihilización constante dirigida hacia ella misma y hacia los objetos . Pero la pregunta de cómo surge la conciencia permanece sin responder . No responderla significa no resolver la cuestión esencial de por qué el humano es capaz de percatarse de todo aquello que constituye su entorno . Ese evitar resolver la cuestión del surgimiento de la conciencia complica aún más la postura sartreana , ¿ Por qué en el organismo humano , que es parte del mundo físico , aparece la capacidad de percatación ? ¿ Por qué no se genera en otros organismos , en un mosquito , por ejemplo ? ¿ O será eso posible ( y de ahí la metáfora del mosquito deslumbrado )? El que Sartre deje de lado esta importante cuestión puede encontrar justificación en su interés dominante que no es precisamente el surgir de la conciencia sino el tipo de fenómeno que es la conciencia no cognitiva , pre-reflexiva , ya que de ahí partirá su elaboración antropológica . Es más , puede afirmarse que abandonar la cuestión de cómo surge la conciencia le evita tener que justificar la presencia del hombre en el mundo la cual es totalmente gratuita . Sartre tampoco quiere dar por sentada la conciencia como una especie de res cogitans cartesiana . Aunque no hay pensador francés moderno que no reaccione ante Descartes , ya sea a favor o en contra , Sartre se propone mantenerse totalmente alejado del idealismo cartesiano pues este supone una conciencia reflexiva gracias a cuya actividad se constituye el yo como una cosa , como un objeto ( cogito , ergo sum ). Pero Sartre también evidencia la enorme dificultad que el cartesianismo no supera : cómo salir del entorno del yo para garantizar la existencia del mundo exterior . No dejarse encerrar por el idealismo cartesiano y dar un salto hacia un realismo radical es una empresa paralela al abordaje sartreano de la conciencia . La convicción inherente al existencialismo de Sartre es que ambas cuestiones , la de la conciencia y la de la existencia del mundo exterior , reciben su respectiva solución partiendo no de la conciencia reflexiva sino de la pre-reflexiva . La existencia del mundo exterior se salva y se garantiza al afirmar que la conciencia pre-reflexiva ( entendida como el puro percatarse ) pone al objeto como 6 El ser y la nada , pp . 63-64 . trascendiéndola , como aquello hacia lo __________________________________________________________________ 50
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