| El apriorismo de Ludwig von Mises | | | |
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__________________________________________________________________
Claudio
Luján
El
apriorismo
de
Ludwig
von
Mises
Timeo
hominem
unius
libri
.
⎯
Tomás
de
Aquino
1
.
Introducción
1
In
connection
with
slavery
,
Thomas
Jefferson
has
said
that
,
when
he
considered
that
there
is
a
just
God
in
Heaven
,
he
trembled
for
his
country
.
Well
,
in
connection
with
exaggerated
claims
that
used
to
be
made
in
economics
for
the
power
of
deduction
and
a
priori
reasoning⎯by
classical
writers
,
by
Carl
Menger
,
by
the
1932
Lionel
Robbins
...
by
disciples
of
Frank
Knight
,
by
Ludwig
von
Mises⎯I
tremble
for
the
reputation
of
my
subject
.
Fortunately
,
we
have
left
that
behind
us
(
Blaug
,
1992
,
pp
.
81-82
).
Estas
líneas
fueron
escritas
por
Paul
Samuelson
antes
de
1972
;
veinte
años
después
Mark
Blaug
expresa
su
convicción
de
que
el
apriorismo
extremo
en
economía
está
en
efecto
superado
.
Sin
embargo
,
no
nos
es
tan
fácil
compartir
esa
visión
a
juzgar
por
lo
que
se
escucha
y
se
lee
en
la
Universidad
Francisco
Marroquín
(
UFM
),
así
como
en
otros
tantos
seminarios
,
principalmente
en
EE
.
UU
.
La
condescendencia
y
el
desprecio
con
los
cuales
buena
parte
de
la
comunidad
de
economistas
observa
a
la
Escuela
Austríaca
es
bien
conocida
,
lo
cual
no
deja
de
tener
un
lado
positivo
pues
contribuye
,
de
paso
,
a
darle
un
poco
de
alegría
a
la
dismal
science
.
Blaug
,
quien
es
a
mi
juicio
un
comentador
objetivo
,
cree
que
“
en
los
años
veinte
,
Mises
hizo
importantes
contribuciones
a
la
economía
monetaria
,
a
la
teoría
de
los
ciclos
de
negocios
y
por
supuesto
a
la
economía
del
socialismo
,
pero
sus
últimos
escritos
sobre
los
fundamentos
de
la
ciencia
económica
están
expuestos
de
forma
tan
idiosincrática
y
dogmática
que
sólo
podemos
asombrarnos
de
que
hayan
sido
tomados
seriamente
por
alguien
”
(
ibid
.).
Para
nuestra
mala
fortuna
no
se
trata
sólo
de
un
puñado
de
académicos
en
vías
de
extinción
;
por
el
contrario
,
el
apriorismo
de
Mises
continúa
reclutando
nuevos
seguidores
,
y
es
por
esta
única
razón
que
quizás
vale
la
pena
criticarlo
.
La
ciencia
económica
ganaría
enormemente
si
se
lograra
separar
para
siempre
al
Mises
economista
del
Mises
filóso-
1Una
versión
anterior
de
este
trabajo
,
ligeramente
modificado
,
hizo
las
veces
de
tesis
de
grado
para
obtener
el
título
de
Licenciado
en
Economía
.
Originalmente
opté
por
centrar
la
discusión
en
La
acción
humana
por
la
unidad
y
coherencia
que
se
esperaría
encontrar
en
un
mismo
volumen
,
y
por
ser
ésta
la
obra
más
representativa
y
comentada
de
Mises
.
Sin
embargo
,
lo
que
buscaba
tampoco
pude
encontrarlo
en
sus
otros
libros
sobre
metodología
.
Pero
quizás
estos
escrúpulos
sean
innecesarios
puesto
que
pareciera
no
existir
una
diferencia
substancial
en
la
posición
metodológica
expuesta
en
sus
diferentes
libros
.
fo
de
la
ciencia
.
El
problema
es
que
esto
__________________________________________________________________
Laissez-Faire
37
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__________________________________________________________________
es
extremadamente
difícil
ya
que
sus
textos
de
economía
están
irremediablemente
impregnados
de
su
apriorismo
,
de
modo
que
el
estudiante
al
aprender
lo
primero
se
expone
también
a
lo
último
.
Jesús
Huerta
de
Soto
nos
cuenta
en
su
estudio
preliminar
de
La
acción
humana
que
“
se
cumplen
ya
diez
años
desde
que
La
acción
humana
comenzara
a
ser
recomendada
por
nosotros
como
libro
de
texto
fundamental
en
un
Curso
de
Economía
Política
en
la
Universidad
Complutense
de
Madrid
,
habiendo
sido
utilizada
como
instrumento
de
estudio
y
trabajo
durante
los
pasados
diez
años
académicos
por
más
de
dos
mil
alumnos
,
que
han
sabido
generar
en
el
mundo
universitario
español
un
rico
acervo
de
experiencias
docentes
e
intelectuales
que
es
preciso
sacar
a
la
luz
”
(
Mises
,
1949
/
66
,
p
.
i
).
Esto
es
aún
más
significativo
si
tomamos
en
cuenta
que
se
trata
de
la
misma
persona
que
afirma
que
la
“
aportación
[
de
Mises
]
en
este
campo
[
metodológico
y
epistemológico
]
se
encuentra
entre
las
más
esenciales
del
gran
economista
austriaco
”
(
ibid
.,
p
.
xli
).
En
la
UFM
el
estudio
de
la
filosofía
de
Mises
es
materia
obligatoria
para
todas
las
carreras
,
mientras
que
el
estudio
de
su
economía
es
prácticamente
una
actividad
extracurricular
.
Igualmente
beneficiado
saldría
el
movimiento
liberal
si
lograra
desprenderse
del
apriorismo
misesiano
ya
que
la
situación
es
tanto
más
absurda
si
se
comprende
que
el
liberalismo
no
lo
necesita
en
lo
más
mínimo
.
El
apriorismo
,
por
el
contrario
,
es
un
estorbo
.
2
2
Por
mencionar
sólo
algunos
ejemplos
:
la
revista
Liberty
lo
declaró
recientemente
el
liberal
del
siglo
,
por
encima
de
nombres
como
Friedman
y
Hayek
(
Liberty
,
January
2000
);
la
publicación
Atlas
del
Sud
celebró
ampliamente
a
Mises
en
una
de
sus
ediciones
(
Atlas
del
Sud
,
Octubre
1999
).
En
ambas
Veremos
que
Blaug
no
exagera
cuando
dice
que
“
las
declaraciones
de
apriorismo
radical
de
Mises
son
tan
intransigentes
que
hay
que
leerlas
para
creerlas
”
(
op
.
cit
.,
p
.
80
).
La
acción
humana
está
,
en
efecto
,
plagada
de
pasajes
de
un
dogmatismo
casi
demente
.
2
.
El
apriorismo
de
Mises
El
objetivo
de
este
trabajo
no
es
servir
de
introducción
al
pensamiento
misesiano
sino
criticarlo
.
Existe
un
buen
número
de
libros
dedicados
a
la
metodología
austriaca
,
así
como
al
apriorismo
de
Mises
,
los
cuales
son
los
indicados
para
facilitar
un
acercamiento
al
tema
.
Este
trabajo
pretende
ser
únicamente
una
guía
para
salir
del
pantano
del
apriorismo
misesiano
;
por
esta
razón
presumo
que
el
lector
conoce
la
obra
en
cuestión
y
está
familiarizado
con
la
temática
,
de
modo
que
sólo
se
explicarán
ciertos
conceptos
en
la
medida
en
que
su
crítica
lo
requiera
.
3
inequívocos
de
apriorismo
,
y
en
ningún
momento
se
hacen
esfuerzos
por
separarse
de
él
.
Lo
mismo
puede
decirse
,
en
líneas
generales
,
de
las
publicaciones
del
Ludwig
von
Mises
Institute
(
The
Free
Market
,
Austrian
Economics
Newsletter
,
Review
of
Austrian
Economics
).
3
Para
una
breve
introducción
al
tema
puede
consultarse
Methodology
of
the
Austrian
School
(
White
,
1977
);
una
exposición
menos
enfática
con
elementos
de
la
praxeología
se
encuentra
en
An
Essay
on
the
Nature
and
Significance
of
Economic
Science
(
Robbins
,
1932
/
35
),
mientras
que
The
Evolution
of
Austrian
Economics
(
Gloria-Palermo
,
1999
)
nos
ofrece
un
comentario
más
reciente
sobre
la
escuela
austriaca
(
véase
también
Rothbard
,
1992
,
y
Vaughn
,
1994
);
en
la
obra
de
Blaug
ya
citada
(
Blaug
,
1981
/
92
)
se
puede
apreciar
el
estado
actual
del
debate
metodológico
en
publicaciones
pueden
encontrarse
rastros
economía
.
__________________________________________________________________
Laissez-Faire
38
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__________________________________________________________________
El
apriorismo
tiene
sus
raíces
en
la
convicción
de
los
matemáticos
griegos
,
de
Pitágoras
a
Platón
,
sobre
la
capacidad
ilimitada
de
la
mente
humana
para
conocer
a
priori
la
realidad
.
Desde
este
punto
de
vista
,
no
sólo
no
existe
la
necesidad
lógica
de
recurrir
a
la
experiencia
sino
que
es
precisamente
la
poca
o
nula
fiabilidad
de
los
datos
sensoriales
la
causa
de
los
equívocos
y
de
la
incomprensión
general
acerca
de
la
naturaleza
del
universo
.
De
hecho
,
fue
tal
el
éxito
de
esa
forma
de
razonar
que
la
lógica
aristotélica
sobrevivió
hasta
la
época
moderna
.
Si
tomamos
en
cuenta
que
Mises
se
esforzó
siempre
por
colocar
a
la
praxeología
junto
a
la
lógica
y
la
matemática
,
no
debe
extrañarnos
que
Huerta
de
Soto
afirme
que
“
frente
al
ideal
positivista
,
Mises
demuestra
en
La
acción
humana
que
se
puede
construir
toda
la
Ciencia
Económica
de
una
manera
apriorística
y
deductiva
.
Se
trata
,
en
suma
,
de
elaborar
todo
un
arsenal
lógico-deductivo
a
partir
de
unos
conocimientos
autoevidentes
(...)
que
nadie
pueda
discutir
sin
autocontradecirse
.”
En
realidad
Huerta
de
Soto
sólo
está
reiterando
lo
que
percibe
en
afirmaciones
de
Mises
tales
como
:
“
El
razonamiento
apriorístico
es
estrictamente
conceptual
y
deductivo
.
De
ahí
que
no
pueda
producir
sino
tautologías
y
juicios
analíticos
.
Todas
sus
conclusiones
se
derivan
lógicamente
de
las
premisas
en
las
que
realmente
se
hallan
contenidas
”
(
op
.
cit
.,
p
.
46
);
o
más
desconcertante
aún
:
“
En
el
concepto
de
dinero
están
implícitos
todos
los
teoremas
de
la
teoría
monetaria
”
(
ibid
.,
p
.
47
);
“
Todos
los
conceptos
y
teoremas
de
la
praxeología
están
implícitos
en
la
propia
categoría
de
acción
humana
”
(
ibid
.,
p
.
78
).
Y
un
buen
día
,
Mises
decidió
que
la
economía
no
era
una
ciencia
experimental
sino
una
ciencia
a
priori
:
Los
sistemas
apriorísticos
,
como
la
matemática
,
construyen
sus
teorías
a
partir
de
axiomas
de
los
cuales
derivan
lógicamente
sus
conclusiones
.
Las
teorías
matemáticas
son
una
serie
de
fértiles
tautologías
donde
las
últimas
conclusiones
se
encuentran
ya
contenidas
en
los
axiomas
,
pero
significan
al
mismo
tiempo
una
clarificación
y
una
profundización
adicional
,
y
a
condición
de
que
no
haya
ninguna
contradicción
interna
dichas
conclusiones
tienen
el
mismo
valor
de
verdad
que
las
premisas
.
La
praxeología
no
es
una
ciencia
histórica
,
sino
teórica
y
sistemática
.
Su
objeto
es
la
acción
humana
como
tal
,
con
independencia
de
todas
las
circunstancias
ambientales
,
accidentales
e
individuales
de
los
actos
concretos
.
Sus
enseñanzas
son
de
orden
puramente
formal
y
general
,
ajenas
al
contenido
material
y
a
las
condiciones
peculiares
del
caso
de
que
se
trate
.
Aspira
a
formular
teorías
que
resultan
válidas
en
cualquier
caso
en
el
que
efectivamente
concurran
aquellas
circunstancias
implícitas
en
sus
supuestos
y
construcciones
.
Sus
afirmaciones
y
proposiciones
no
derivan
del
conocimiento
experimental
.
Como
los
de
la
lógica
y
la
matemática
,
son
a
priori
.
Su
veracidad
o
falsedad
no
puede
ser
contrastada
mediante
el
recurso
a
acontecimientos
ni
experiencias
.
Lógica
y
temporalmente
,
son
anteriores
a
cualquier
comprensión
de
los
hechos
históricos
(
ibid
.,
p
.
39
,
véase
también
la
cita
en
la
página
siguiente
).
No
es
que
la
economía
deba
ser
excluyentemente
una
o
la
otra
,
pero
el
considerar
a
la
economía
como
una
disciplina
a
priori
tiene
,
como
vimos
,
consecuencias
inevitables
.
Está
claro
que
si
creemos
en
las
pretensiones
de
este
apriorismo
intransigente
,
debemos
pensar
entonces
que
Mises
hubiera
podido
descubrir
la
totalidad
del
conocimiento
económico
sin
salir
de
su
oficina
.
Y
como
a
él
mismo
esto
debe
de
__________________________________________________________________
Laissez-Faire
39
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__________________________________________________________________
haberle
parecido
exagerado
,
afirma
en
una
de
sus
contradicciones
,
que
la
economía
“
no
se
limita
a
formular
puros
razonamientos
apriorísticos
,
desligados
por
completo
de
la
realidad
”
(
ibid
.,
p
.
79
),
y
que
no
cree
“
que
sea
posible
una
economía
pura
y
exclusivamente
teórica
”
(
p
.
80
).
Si
la
apriorística
praxeología
es
una
ciencia
“
teórica
y
sistemática
”,
¿
cómo
es
posible
que
la
economía
,
siendo
una
de
sus
ramas
,
no
lo
sea
?
Quien
no
es
apriorista
debe
hacer
un
esfuerzo
hermeneútico
considerable⎯y
probablemente
casi
nunca
exitoso⎯para
colocarse
en
la
perspectiva
de
Mises
y
tratar
de
razonar
en
la
forma
en
que
él
lo
hubiera
hecho
.
Debemos
deshacernos
de
nuestras
propias
rutinas
mentales
y
leer
y
comprender
sus
afirmaciones
como
lo
haría
quien
procede
de
forma
deductiva
,
posee
verdades
absolutas
o
reflexiona
sobre
esencias
.
Puesto
que
la
empresa
me
parece
extremadamente
difícil
,
tenemos
que
juzgarlo
con
un
sistema
de
pensamiento
diferente
al
suyo
,
aunque
esto
quizás
podría
recordarle
el
polilogismo
que
tanto
aborrece
.
Por
otro
lado
,
si
lo
juzgáramos
con
un
sistema
de
pensamiento
igual
al
suyo
,
entonces
,
lo
más
seguro
es
que
estaríamos
de
acuerdo
.
Desde
el
inicio
Mises
no
oculta
sus
intenciones
:
su
obra
está
dominada
por
la
ambiciosa
intención⎯demasiado
ambiciosa
para
permanecer
dentro
de
la
sensatez⎯de
elaborar
una
“
Ciencia
General
de
la
Acción
Humana
”
que
se
sustenta
históricamente
en
la
teoría
subjetiva
del
valor
y
se
presenta
como
una
teoría
general
de
la
elección
y
la
preferencia
(
ibid
.,
p
.
3
).
“
Las
ciencias
apriorísticas⎯la
lógica
,
la
matemática
y
la
praxeología⎯aspiran
a
formular
conclusiones
universalmente
válidas
para
todo
ser
que
goce
de
la
estructura
lógica
típica
de
la
mente
humana
”
(
ibid
.,
ciencia
”
como
graciosamente
la
llama
)
le
dio
el
nombre
de
praxeología
.
Esta
nueva
ciencia
,
recién
descubierta
por
Mises
,
es
además
una
ciencia
a
priori
:
Los
teoremas
que
el
recto
razonamiento
praxeológico
llega
a
formular
no
sólo
son
absolutamente
ciertos
e
irrefutables
,
al
modo
de
los
teoremas
matemáticos
,
sino
que
también
reflejan
la
íntima
realidad
de
la
acción
,
con
el
rigor
de
su
apodíctica
certeza
e
irrefutabilidad
,
tal
como
ésta
,
efectivamente
,
se
produce
en
el
mundo
y
en
la
historia
.
La
praxeología
proporciona
conocimiento
preciso
y
verdadero
de
la
realidad
(
ibid
.,
p
.
48
).
Estas
líneas
son
suficientes
para
explicar
el
asombro
de
Blaug
,
pero
no
son
ni
mucho
menos
las
únicas
,
como
se
verá
a
lo
largo
del
trabajo
.
Puede
ser
que
lo
que
más
se
aproxime
a
una
justificación
del
apriorismo
como
método
sean
estas
palabras
:
“
El
que
el
hombre
carezca
de
capacidad
creadora
bastante
para
concebir
categorías
disconformes
con
sus
relaciones
lógicas
fundamentales
y
con
los
principios
de
la
causalidad
y
la
teleología
impone
la
que
cabe
denominar
apriorismo
metodológico
”
(
ibid
.,
p
.
43
).
Podríamos
,
utilizando
las
mismas
armas
que
Mises
,
argumentar
seriamente
que
sabemos
por
introspección
que
nuestras
acciones
no
son
siempre
teleológicas
;
más
adelante
diremos
algunas
palabras
sobre
la
introspección
.
Pero
esta
es
quizás
una
buena
ocasión
para
mencionar
un
ejemplo
fabricado
que
me
vino
a
la
memoria
con
respecto
a
las
acciones
teleológicas
.
Es
lo
que
André
Gide
llama
un
acto
gratuito
,
un
acto
que
no
persiga
fin
alguno
:
en
Les
caves
du
Vatican
,
uno
de
sus
personajes
decide
dejar
al
azar
la
decisión
de
empujar
del
tren
a
un
perfecto
desconocido
.
Obviamente
no
tenemos
por
qué
ser
tan
trágicos
para
buscar
ejemplos
de
actos
en
los
cuales
el
curso
a
seguir
esté
determinado
por
el
azar
y
no
por
la
razón
.
En
p
.
68
).
A
esta
nueva
ciencia
(“
nuestra
un
acto
de
este
tipo
,
donde
la
única
vo-
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Laissez-Faire
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